lunes, 14 de septiembre de 2009

Si el corazón pensara dejaría de latir


«Soy un rendido.» Durante dos o tres noches, nos consta, el capitán Alegría estuvo definiendo este momento. Es probable que se negara a decir «me rindo» porque esa frase respondería a algo congelado en un instante cuando la verdad es que él se había ido rindiendo poco a poco. Primero se rindió, después se entregó al enemigo. Cuando tuvo oportunidad de hablar de ello, definió su gesto como una victoria al revés.

[...]

Unos instantes de silencio para que el sacerdote terminara su plegaria que concluyó con una bendición trazada en el aire con la languidez de un adiós entristecido e inmediatamente «Pelotón», silencio, «Apunten», silencio, «Fuego».
Si alguien gritó, nadie pudo oírlo. Cuando el capitán Alegría recobró el conocimiento, estaba sepultado en una fosa común amalgamado en un caos de muertos y de tierra. Tardó tiempo, pero, desoyendo el dolor, supo que había transgredido, de nuevo, las leyes del mundo donde el retorno está prohibido. Estaba vivo. Un universo de médulas, cartílagos inertes, sangre coagulada, heces, alientos detenidos y corazones sorprendidos por la muerte conservaron bolsas de aire en aquel desajuste de difuntos que le permitió respirar aun enterrado. Estaba vivo.
Los Girasoles Ciegos


Yo también soy un rendido

solo espero que algún día

mi retorno no esté prohibido

pueda volver a la vida

como en su momento lo hizo

el capitán Alegría

2 comentarios:

  1. Hace falta demasiada desesperación y demasiado dolor para escribir unos buenos poemas, para escribir un aceptable conjunto de palabras….

    Quien dice sin embargo que esto son palabras, solo son grupos de caracteres que se apiñan intentando dar sentido a la sinrazón.

    Solo hay una forma de hacer pasar de unos a otros lo que hay dentro de esta carne posada sobre huesos…alma?

    Pasará el tiempo y no quedará nada, ni la carne, ni los huesos, ni el alma escondida….solo quedará este batallón de formas, ladrones de espíritus y emociones.

    Al igual que los lienzos roban los cuerpos para hacerlos eternos, los poemas robaran nuestra alma para hacerla eterna.

    Y nuestra carne quedara posada sobre los huesos hasta desaparecer…y nuestra alma volara a ningún lugar….y no quedara nada….y sólo quedara la nada.

    "Beatriz Gomez"

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  2. No te rindas...ni seas un rendido nunca.

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